¿Alguna vez imaginaste tener superpoderes? ¿Qué tal si te dijeramos que puedes tener un superpoder único y especial? Se trata de la capacidad de convencer a los demás a través del arte de vender. Conoce las características y superpoderes de un vendedor exitoso.
Quizás no podemos decirte cómo volar u ofrecerte una capa de invisibilidad, pero sí podemos compartir contigo cuáles son las características de superhéroe que un vendedor exitoso debe desarrollar:
1. Invulnerabilidad
Así como un superhéroe nunca se rinde ante un posible fracaso, tú deberás también trabajar tu nivel de tolerancia a la frustración. Lo primero que debes hacer es aceptar que siempre es posible darse con un rechazo. No importa qué tan bueno o genial sea tu producto, siempre podrás encontrarte con personas que no lo consideran el adecuado. Por ello debes prepararte para aceptar un rechazo e ir tras de otro cliente, analizando mejor el mercado para así acercarte a los prospectos más indicados.
2. Fuerza sobrehumana
Si tus superhéroes favoritos pueden elevar un auto con apenas la fuerza de un brazo, tú puedes levantarte cada día convencido de luchar por tu objetivo. Eso es lo que llamamos motivación. Para lograr sentirte motivado es importante que trabajar para convertirte en una mejor versión de ti mismo, teniendo en claro hacia dónde quieres dirigirte.
3. Percepción extrasensorial
Aprende a ser empático y entender a tus clientes puesto que es fundamental que puedas demostrarle lo mucho que te importan más allá del cierre de la venta. Con el tiempo serás capaz de desarrollar la capacidad de saber lo que tu cliente necesita incluso antes de que te lo diga, adelantándote a sus necesidades y ganándote su confianza.
4. Precognición
¿Crees que se pueda conocer el futuro? Quizás no lo que sucederá en el mundo, pero sí que podrías ayudar a tus clientes a ver más allá del presente y demostrarle como la compra que te hará lo ayudará a mejorar su vida. Procura hablarle de experiencias de vida, coméntales las de otros compradores o incluso las que tú mismo has tenido. Recuerda que los consumidores somos más emocionales que racionales, así que debes aprender a aprovechar este impulso.
5. Cambio de forma
Ya lo dijo Darwin: “No es el más fuerte ni el más inteligente el que sobrevive, sino el que mejor se adapta al cambio.” Prepárate para adaptarte a las circunstancias y define una estrategia para cada tipo de cliente. Comienza por clasificarlos dentro de categorías basadas en su personalidad, como desconfiado, dominante, indeciso, curioso, entre otros muchos.
Fuente: Plusempresarial.com
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